Para tener creatividad y ganas de progresar no hay edad
Michelle
Morales, de 21 años de edad, joven madre de dos nenas de 1 y 3 añitos y
esposa de un joven de embarcación. Es a quien tendremos la oportunidad de
conocer un poco más.
“Michu” seudónimo con
el que la conocen la mayoría de sus clientes con quienes mantiene una excelente
relación, es una joven que se dedica a trabajar artesanía textil.
Su labor se trata de bordar sobre
almohadas de todo tamaño y forma. Realiza nombres y dibujos que son solicitados
por su numerosa y bendecida cantidad de clientes.
Nos cuenta, que desde los 18 años aprendió a realizar esta
actividad del bordado gracias a las enseñanzas de su suegra “desde la primera
vez que me enseñaron, me encantó y desde ese entonces no he dejado de bordar”.
La manera de cómo Michu decide ver en sus habilidades la oportunidad
de generar ganancias es muy peculiar. Puesto
que, nos explica que hace 1 año es cuando descubrió que podía hacer de esto, un
pequeño negocio “desde que inicié veía esto como un simple pasatiempo porque
hacía almohaditas para mis hijas y mi esposo, era una forma de hacerles
detallitos pero luego comencé a publicar en Facebook lo que hacía y las
personas publicaban que cada foto les gustaba y así es como comenzaron a
hacerme pedidos”.